En Urrao Antioquia, pueblo ubicado en el Suroeste, tiene en su parque principal un árbol que recuerda al gobernador asesinado en las montañas de este territorio que ha sido afortunado por la naturaleza, pero también muy golpeado por la violencia de los hombres.
Sabemos todos que este árbol, y sobre todo la placa, son un vicio político, pero que ojalá la placa se desaparezca, y que con el tiempo, el árbol crezca y de sombra, y así haga feliz a un Urraeño.
Eso si sería un buen recuerdo y honor hacia el gobernador, y todos los asesinados en estas tierras fertiles.
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